El artículo que aquí se presenta sugiere nuevas formas de abordar los exergames para la rehabilitación física y mejorar la inmersión e implicación de los jugadores. El objetivo principal (pero no exclusivo) es aumentar la motivación de los niños y adolescentes con deficiencias físicas graves para que realicen los ejercicios necesarios mientras juegan. El entorno de juego propuesto se basa en el sensor Kinects y el motor de juego Blender. Se ha implementado un middleware que transmite eficazmente los datos del sensor al juego. Dentro del juego, se han desarrollado diferentes mecanismos recientemente propuestos para distinguir los gestos puros de ejercicio de otros movimientos utilizados para controlar el juego (por ejemplo, abrir un menú). La principal contribución es la amplificación de los movimientos débiles, que permite a los discapacitados físicos tener experiencias de juego similares a las de la población media. Para comprobar la viabilidad de los métodos propuestos, se implementaron cuatro minijuegos que fueron probados por un grupo de 11 voluntarios con diferentes discapacidades, la mayoría de ellos atados a una silla de ruedas. También se ha comparado su rendimiento con el de un grupo de control sano. Los resultados son en general positivos y motivadores, aunque queda mucho por hacer para mejorar las funcionalidades. Hay una gran demanda de aplicaciones que ayuden a incluir a los discapacitados en la sociedad y a mejorar sus condiciones de vida. Este trabajo contribuirá a proporcionarles más diversión durante el ejercicio.